Esta semana, el médico Luis Castillo asumió como subsecretario de Redes Asistenciales, cargo en el que se desempeñó durante la primera administración del Presidente Sebastián Piñera. En conversación con «El Líbero», el nuevo jefe de la red de hospitales y consultorios del país señala que el Jefe de Estado le encargó tareas como reorganizar la gestión de la red asistencial y generar una atención primaria de salud «mucho mas resolutiva».

El cambio de gabinete fue algo inesperado, tanto de ministerios como de subsecretarias. ¿Usted cómo ve este cambio?

-El gobierno  ha hecho un cambio en el momento preciso, no se ha demorado mucho en cuanto tiene una evaluación respecto algunas cosas, creo que va en el camino correcto. Chile necesita mucha mas «ejecutividad» en los cambios. Este cambio apunta a un mayor dinamismo y rápidamente solucionar algunas dificultades que se habían visto.

-¿Cuál es el significado que tiene este cambio en la subsecretaria?

-Hay un cambio de enfoque, hay mucha mas presencia central en los hospitales que están con dificultades, hay una aceleración en los cambios de la atención primaria de la salud. Va a haber un reanálisis de toda la infraestructura hospitalaria que permitirá que se mejore algunos aspectos. Hay un cambio de mano que estamos viendo.

El gobierno  ha hecho un cambio en el momento preciso, no se ha demorado mucho en cuanto tiene  una evaluación respecto algunas cosas, yo creo que va en el camino correcto».

-Se ha comentado que usted viene a apoyar al ministro Emilio Santelices porque tiene una mayor experiencia política.

-Sí pero esos son comentarios que yo no me atrevería a decir. Yo soy profesor universitario y conozco algunas cosas pero no soy un profesional de la política ni mucho menos.

-Entonces, ¿cuál sería su rol en esa calidad para apoyar al ministro?

-Creo que es darle metodología, darle equilibrio, prudencia en algunas determinaciones. Ayudar a integrar, coordinar y trabajar en equipo para solidificar lo que ya se ha venido haciendo y potenciar aquellas áreas donde sea necesario.

-¿Cuales son los desafíos que tiene al asumir nuevamente como subsecretario de Redes Asistenciales?

-Lo que nos ha pedido el Presidente es que específicamente haya una preocupación bastante intensa y potente en cuatro aspectos: en infraestructura hospitalaria y de consultorios; reorganizar la gestión de la red asistencial;  listas de espera priorizadas, y generar una atención primaria de salud mucho mas resolutiva.

Listas de espera: Poner en marcha sistema digital

-¿Ya se ha definido la cantidad de hospitales y centros de salud familiar que va a construir el Gobierno?

-El Gobierno está proyectando un plan de infraestructura para 8 años que involucra más de 2.500 camas nuevas y una nutrida agenda de inversiones en la atención primaria. Hay establecimientos en construcción actual, otros en licitación y adjudicación en los próximos meses, y otros en estudio que empezarán su construcción casi al final de este gobierno. Ahora, en este plan de infraestructura muchos de estos proyectos van a ser por inversiones sectoriales y otras por asociaciones público-privadas. Estas concesiones van a  seguir generando hospitales públicos como es hasta la fecha, sin “bata blanca”. Es decir, los servicios clínicos van a continuar en manos del Estado. También, hay un plan de construcción de consultorios a lo largo del país que permite saber, y con cierta exactitud, cuántos van a ser los consultorios que están proyectados construir, que lo anunciará el Presidente.

-¿Qué regiones serán prioritarias en este plan de construcción?

-Hay un estudio que permite definir que aquellas regiones que tienen mas déficit en el número de camas respecto a la población, van a tener prioridad. Por otro lado, estamos ad portas de solucionar el tema del Hospital Sótero del Rio, que es un gran hospital y que va a solucionar un problema bastante grande en La Florida y en Puente Alto. Espero que llegue a buen puerto una vez que salga el análisis y la toma de razón de la adjudicación en la Contraloría.

Muchos de estos proyectos van a ser por inversiones sectoriales y otras por asociaciones público-privadas. Estas concesiones seguirán generando hospitales públicos como es hasta la fecha, sin “bata blanca”. Es decir, los servicios clínicos van a continuar en manos del Estado».

-¿Qué metas le puso el Presidente respecto a la gestión de la red asistencial?

Buscamos generar una mejoría y una «potenciación» de todos los elementos de gestión de la red, de disciplina presupuestaria, de armar una red mucho mas potente, mucho mas resolutiva en la atención primaria. Y mejorar los servicios de salud como un ente de administración de recursos del Estado y de prestaciones hacia la ciudadanía. Hay una mirada muy permanente y muy inquisitiva de parte del Presidente, quien nos pide que podamos ver esta tema con lujo de detalle. Sobre las listas de espera tenemos que poner en marcha pronto un sistema nuevo, digital, transparente, con mucha información para la gente y continuar con las reducciones progresivamente, de acuerdo a las capacidades resolutivas de las diferentes regiones y servicios de salud a lo largo del país.

Sobre las listas de espera tenemos que poner en marcha pronto un sistema nuevo, digital, transparente, con mucha información para la gente y continuar con las reducciones progresivamente».

-El gobierno se había puesto una meta respecto a este punto,,.

-Esa meta se va a cumplir, pero mas allá de cumplir esa meta acá habrá un cambio estructural para que eso no se vuelva a repetir o, por lo menos, para que las personas tengan claro en qué lugar de la lista de espera están y cuándo van a ser intervenidas.

Cuestionamientos DC: «Es bastante fácil hacer declaraciones sin ningún sustento jurídico, calumniosas»

-Usted asume justo a días de que la comisión presidencial por el Acuerdo Nacional de Salud de a conocer las conclusiones del informe.

-Además de los aspectos que te mencioné, vamos a colaborar en la reestructuración de Fonasa y en la ley de Isapres.

-Según ha trascendido, el Acuerdo Nacional de la Salud planteará la implementación la digitalización de las listas de espera, ¿se apunta a digitalizar el sistema de Salud?

-La digitalización de todo el sistema va a permitir que la identidad de los pacientes, sus historias y su información clínica estén en línea, desde donde quieran mirarlo, de acuerdo a ciertas contraseña. Esto permitirá, con autorización de las personas, que aquellos profesionales que requieran ver ese historial clínico puedan tener acceso en cualquier parte del país. Este proyecto junto a la informatización clínica, la licencia medica electrónica y la receta electrónica, entre otros, va a permitir que se modernice el sector.

-Usted ocupó este mismo cargo durante la primera administración del Presidente Piñera, a raíz de eso lo han criticado por la forma en que esa gestión abordó las listas de espera.

-En relación a las listas de espera y sus manipulaciones en el Hospital San José o el caso de la clínica Maruri, creo que todo esto nació a propósito de un análisis que llegó luego de un sumario y una investigación interna. Pedí que llevaran a Fiscalía los datos para investigar lo que estaba sucediendo allí. Eso se hizo entre 2013 y 2014, y está en plena fase de investigación entonces me parece bien que se investigue.

-Además, lo han responsabilizado del sobregasto que significó la construcción del Hospital de Rancagua.

-Todos los aumentos de obra pasan por la Dirección de Servicios de Salud y por un chequeo interno de la División de Inversiones, no por la Subsecretaría de Redes Asistenciales. Aún así, es obvio que nadie puede autorizar un pago extraordinario si no hay un sustento real por aumento de obras complementarias, que estén fundamentadas y que sustenten una toma de decisión de este tipo.

-La Democracia Cristiana ha cuestionado su nombramiento y lo ha vinculado con la investigación del asesinato del ex Presidente Eduardo Frei Montalva.

-Es bastante fácil hacer declaraciones sin ningún sustento jurídico, calumniosas y carentes de un marco moral. Son, entonces, meras opiniones políticas que enlodan el prestigio de profesionales y especialmente el prestigio de dicha corriente política al caer en prácticas abusivas e impropias.